sábado, 30 de agosto de 2025

Zoonosis

Teníamos las horas contadas para precisamente vernos y a posterior ser destinados a cumplir los caprichos del chantaje y de la codicia. Nuestros cuerpos no nos pertenecían al final de cuentas y venían siendo utilizados para diversos fines. Uno precisamente, era hacer del sábado un día memorable para el sobrino del administrador y que acababa de llegar de vacaciones de la universidad.

Tenía la mirada algo esquiva pero sabía corresponder a la inocencia de sus años y la inexperiencia en lo que se trata de lo sexual. Acababa de llegar otra vez a la ciudad y pareciera que nunca tendría las ganas de aplicar sus conocimientos en la sociedad, quizás por la apatía y la clara resolución de que necesita divertirse como sea, para que le dupliquen la mesada.

- Llévame a otro lugar - le dijo la dama al joven estudiante.

 - Te llevaré a uno más íntimo - le respondió.

- Pero apúrate porque se nos acaba el tiempo - recordó la dama.

El tiempo límite eran las 6:00 a.m. y el objetivo era realizar todo lo que el joven llegara a proponer. Pero resultó que las propuestas no recayeron sobre interacción alguna entre ambas personas. Sino que se buscaba la diversión mutua, como de amigos y gente que puede seguir conociendo a otras. Y fue así que transcurrió el tiempo.

Sólo existían sonrisas, pasos de baile improvisados y cantos breves o coros de músicas conocidas en ese lapso. El joven había olvidado o simplemente desconocido toda la capacidad o potencial que tenía frente a su inerme y moralmente indefensa dama. De pronto los papeles se invierten y es a él a quien buscan ahora con cierta insistencia.

De pronto surgen las cuestiones: ¿De dónde está ella y con quién? ¿Por qué la dejaron ir sin director o representante?. En el otro lado, el enamorado venía de cumplir un requerimiento o atención sexual con una proveedora de cargamento. Cada instante el imaginaba a su amada en vez de la mujer que le asignaron. La sesión se extendió mas de lo debido porque durante la tarde se tenía aún labores o coordinaciones que interrumpían a la seller.

Contaminados y a cada quien según su origen. Ambos transitan hacia su hogar común, el preparando un argumento por si se llegara a oídos de un compañero a su amada. Y ella feliz porque no pasó nada más que un juego de hacer amigos. Pero esta vez tuvo suerte, por cuanto los que asistieron a la sesión nocturna; pusieron la atención en la bella dama y no pararán hasta conseguir más información.

Frente a la cocina, se sitúa la mesa y ambos no han decidido contar como le fue al otro. Lo cierto es que un día antes se designaron todas las tareas y caprichos a distintos agentes; y según las referencias se viene cumpliendo bien. 

Nuestra pareja continúa su rutina y previa al acto sexual de todas las tardes y con amor. Vuelven hacia el lugar donde estuvieron un día antes y proyectaron como referencia sus labores o encargos muy a prueba de su amor.


Lince, 31/08/2025

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