jueves, 19 de marzo de 2009

Quiero creer que mi memoria ya no da más. Que el paso de mi mundo ha sido fútil y que no encontraré mas salida. No puedo más el mundo me pesa toneladas y conviene olvidarme quien fui y a qué vine. Total soy gay y los demás no existen.

Quiero a mi madre de vuelta conmigo, quiero que mi padre me vuelva a estrechar la mano y que mis hermanos me dejen jugar futbol nuevamente. No sé porque pido tanto, ahora que sentado frente a apenas dos metros del acantilado, medito por la vida que nunca creí tener. La tarde avanza, el celular no suena, el serenazgo que vigila atentamente el paso de unos glúteos gimnastas. Estoy listo para destruir esta hoja, porque si no la destruyo significará que sobreviví y que Armando apenas se ha retrasado unos minutos para pedirme que regresemos…

No hay comentarios: